La actriz Sasha Montenegro, figura popular del cine mexicano del siglo XX, murió el miércoles 14 de febrero tras sufrir un derrame cerebral. Tenía 78 años de edad.
Durante los últimos años, había combatido a un cáncer en los pulmones que la aquejaba.
Su larga cabellera negra, sus facciones felinas y cautivantes, además de una figura envidiable hicieron de Sasha Montenegro una de las actrices más cotizadas en la década de los 70 y parte de los 80, cuando el llamado cine de ficheras dominaba la producción cinematográfica de México.
Como toda estrella su vida tuvo algo de polémica, sobre todo cuando se relacionó con el expresidente mexicano José López Portillo.
Aleksandra Acimovic Popovic, nombre real de la actriz, nació en Bari, Italia, el 20 de enero de 1946, lugar donde sus padres Zivojin A?imovic y Silvia Popovic, habían emigrado desde Yugoslavia. La familia de la actriz pertenecía a la aristocracia de Montenegro.
Muy pequeña la familia vuelve a cambiar de residencia y esta vez lo hacen en Argentina, donde su padre muere al poco tiempo de haberse asentado.
Su mamá vuelve a casarse con un empresario argentino.
Fue en la provincia argentina de Mendoza donde la joven realiza sus estudios de ballet y periodismo.
Era 1969 cuando Alekzandra viaja a México de vacaciones y durante una comida se le acercó Blanca Estela Limón, quien se convertiría en su representante, para ofrecerle un trabajo en la película “Un sueño de amor”,
Así a los 23 años de edad comienza su carrera artística.
Entonces es cuando cambia su nombre a Sasha Montenegro y no vuelve a Argentina con su familia.
“Santo vs. la magia negra” (1973), “Fe, Esperanza y Caridad” (1974), “Bellas de noche” (1975), “La vida difícil de una mujer fácil” (1977), “¡Oye Salomé!” (1978), “Muñecas de medianoche” (1979), “Las cariñosas” (1979), “Blanca Nieves y… sus 7 amantes” (1980), “La pulquería” (1981), “Pedro Navaja” (1984) y “El diablo, el santo y el tonto” (1987) son algunas de las más de 70 películas que realizó a lo largo de su carrera, siendo las últimas “Una de zombis” (2003) y “The End of Silence” (2006).
Pese a su imagen seductora Sasha Montenegro era una mujer muy formal fuera de los escenarios. Por eso aseguró al periodista Gustavo Adolfo Infante en una entrevista, que sólo había tenido tres novios con los cuales no prosperaron sus relaciones por su inseguridad al estar con una artista, hasta que llegó a su vida José López Portillo, expresidente de México (1976 – 1982).
Ellos se conocieron en España en 1984, donde ella se encontraba de gira con la obra Nunca en domingo, durante un descanso de la temporada decidió visitar Sevilla sola, ahí por casualidad se encontraron, la invitó a comer y durante la semana que ella estuvo en esa ciudad salieron varias veces.
Ella comentó que si bien no era un hombre guapo, sí eran encantador y con mucha cultura, que fue lo que la conquistó.
“Nos volvimos a ver en Roma, pero la verdad es que no pensé en lo que iba a pasar, me sentía muy bien con él, era agradable estar con alguien con quien podías hablar, compartir ideas, alguien que además tiene su nivel cultural y que tiene mucho que decir, las cosas se fueron dando”, compartió la actriz.
La polémica se desató cuando la relación ya se llevaba públicamente, pero López Portillo estaba casado con Carmen Romano, con quien tenía tres hijos, su divorcio se dio hasta 1991 pero para ese entonces ya habían nacido Nabila (1985) y Alexander (1987), hijos de Sasha Montenegro con el político.
La actriz se casó primero por lo civil con el expresidente en 1991 y puedo hacerlo por la vía religiosa hasta junio del 2000, un mes después de que la exprimera dama muriera.
Para ese entonces López Portillo ya había tenido hace cinco años un infarto cerebral, por lo que su salud se encontraba mermada, lo que había dado pie a un pleito entre la actriz y la familia de su esposo, quienes lo alejaron de su lado, la acusaron de haberlo maltratado e iniciaron un juicio de divorcio contra ella, el cual Sasha ganó porque no encontraron causal para fallar en su contra.
Aún así el expresidente murió el 17 de febrero de 2004 lejos de ella, pero aún siendo su esposo, por lo que Montenegro era la legítima viuda, aunque ella aseguró que no le dejo herencia alguna y sí muchos problemas.
Fue hace cinco años cuando la exactriz apareció en un evento público, donde platicó con los medios y les explicó qué hacía desde su retiro, contándoles que se ha dedicado a viajar con sus hijos y a atender una serie de negocios que emprendió después de decidir dejar la vida pública, pero sobre todo a vivir una vida tranquila y en paz.
“Mi vida se ha centrado en mis hijos, claro que ya están grandes pero yo los sigo viendo chiquitos”, expresó Sasha Montenegro en esa ocasión.